jueves, 23 de julio de 2015

TEXTO NARRATIVO

  Es un relato en el cual un narrador cuenta determinados hechos que ocurren en el transcurso del tiempo, se ambientan en un lugar y suceden a los personajes.

Los textos narrativos tienen los siguientes elementos:
Un narrador que es la voz del texto que cuenta la historia. El narrador no debe confundirse con el autor (persona real que crea el relato).
El narrador puede o no participar de los hechos que narra, es decir, puede ser un personaje o puede contar una historia sin participar de los hechos.

  • Si es un personaje, decimos que el narrador tiene una posición interna a la historia que cuenta. Algunas palabras del cuento están en primera persona, por ejemplo: “yo”, “nosotros”, “dije”, “me”, salimos”, etc.

  • Si el narrador no es un personaje, es decir, si cuenta hechos que no le ocurrieron a él sino a  otros, decimos que tiene una posición  externa a la historia que narra. Las palabras del cuento se encuentran en tercera persona, por ejemplo: “él”, “el viejo”, “se acordó”, “dijo”, etc.
  • Este puede ser un personaje o no.
        Existen dos tipos de narradores externos:
- El narrador omnisciente que sabe todo lo que hacen, piensan y sienten los personajes, y
- El narrador testigo que es un observador que transmite solamente aquello que puede percibir. Su conocimiento acerca de los personajes es menor que en el caso anterior.

  • Personajes que actúan, piensan, hablan y sienten.
  •  Son seres ficticios. Es frecuente que el narrador describa a los personajes presentando sus características físicas, sus rasgos de personalidad o datos relevantes sobre sus vidas. Cuando el narrador describe, deja a un lado la tarea de narrador para transformarse en descriptor. Las características de los personajes es fundamental para comprender la historia.
  •         Todos los personajes cumplen una función en el relato.
  •         Personajes principales: son aquellos en torno a los cuales se desarrolla la historia.
  •         Personajes secundarios: son solo importante en el desarrollo de los acontecimientos.
  •         Las características físicas de los personajes, y su aspecto reciben el nombre de grafopeya.
  •         Los rasgos de la personalidad, su aspecto moral y de carácter, recibe el nombre de etopeya.
  • Hechos que realizan los personajes.
  • Son los acontecimientos del relato. Se relacionan entre sí y cada uno tiene una consecuencia. Los hechos que cuenta el narrador son anterior al momento del relato.
  • Circunstancias de lugar y tiempo en que los personajes actúan.
  • Esta información del contexto, suele aparecer a lo largo de todo el texto.
 Estructura del texto narrativo

  • Marco
  • -          En las historias siempre hay personajes movidos por sentimientos. Su personalidad y circunstancias en que viven determinan su modo de actuar.
  • La parte del texto en la que se describen las características de los personajes, así como los datos de lugar y de tiempo en que actúan constituyen el marco de la narración.
  • Es frecuente que las historias comiencen por el marco, es decir, presentando a los personajes y muestren las circunstancias antes de hacerlos actuar. A veces sucede que esta información no se muestra al comienzo, sino en otras partes del texto.
  • Complicación
  • -          Las historias comienzan con una situación estable, normal, donde no sucede nada, hasta que un hecho importante produce una transformación.
  •      Cuando nos encontramos frente a estos hechos estamos en la complicación de la historia. Para reconocer el comienzo de la complicación podemos preguntar: ¿qué pasó en la historia?
  • Resolución
  • -          Las historias por lo general concluyen resolviendo ese problema o complicación. Esta resolución no siempre es la que más nos gusta o imaginamos. Para reconocerla nos preguntamos: ¿Qué pasó finalmente?

viernes, 17 de abril de 2015

Tarea domiciliaria- Entregar en hoja suelta, prolijo, escribir con bolígrafo.
 Entrega martes 5 de mayo.

Ejercicio de clasificación de palabras según su acentuación.

Morir

El primer recuerdo importante de Bruno Ríos provenía de una tarde de verano en el parque, cuando tenía tres años. No recordaba exactamente qué parque era,pero sí recordaba el cielo azul. De hecho, el cielo azul era lo primero que surgía en su mente, seguido por el pasto, tan refulgente que le parecía un mar de esmeraldas, pintado con acuarela. Recién entonces aparecía él mismo en el recuerdo, corriendo. En realidad, lo recordaban sus pies, con un calzado rojo, moviéndose encima del verde. Y finalmente llegaba a su memoria esa mariposa de alas carmesí, como dos gotas de sangre.
Es como un ángel rojo, pensó Bruno mientras corría, incansable, tras esas alas. Solo un niño, en especial un niño pequeño, podía sentir una fascinación así por algo tan simple; un niño y quizá un viejo, concluyó Bruno, tiempo después. Comoquiera que fuese, él era capaz de recordar la sensación tan clara como si la viviera una vez más, como si hubiese quedado grabada en sus células.

Fragmento: Música de Vampiros de Federico Ivanier. Ejercicio extraído de “Prácticas 2” Editorial Santillana.

- 1. Las palabras agudas se acentúan en la última sílaba. Busca 6 ejemplos
en el texto y realiza una lista. Sepáralas en sílabas y remarca su sílaba tónica. 

a.
b.
c.
d.
e.
f.
-
2. Las palabras graves se acentúan en la penúltima sílaba. Busca 6
ejemplos en el texto y procede igual que en el caso anterior. Ej.: re-cuer-do.

a.
b.
c.
d.
e.
f.
- 3. Las palabras esdrújulas se acentúan en la antepenúltima sílaba.
Busca todos los casos que haya en el texto y procede igual que anteriormente. Ej.: mo-vién-do-se.


- 4 . Busca un tilde diacrítico diferenciador y explica su uso.



- 5 .¿ Hay algún adverbio con sufijo -mente? ¿Por qué es un caso especial?



Sabías que... el acento es la mayor intensidad con que se pronuncia una sílaba y solo en algunos casos se marca gráficamente con el tilde?

jueves, 9 de abril de 2015

El murciélago - 
Cuando era el tiempo muy niño todavía, no había en el mundo bicho más feo que el murciélago.
El murciélago subió al cielo en busca de Dios. No le dijo:
-Estoy harto de ser tan horroroso. Dame plumas de colores.
No. Le dijo:
-Dame plumas por favor que me muero de frío.
A Dios no le había sobrado ninguna pluma.
-Cada ave te dará una pluma -decidió.
Así obtuvo el murciélago la pluma blanca de la paloma y la verde del papagayo, la tornasolada pluma del colibrí y la rosada del flamenco, la roja del penacho del cardenal y la pluma azul de la espalda del martín pescador, la pluma de arcilla del ala de águila y la pluma de sol que arde en el pecho del tucán.
El murciélago, frondoso de colores y suavidades, paseaba entre la tierra y las nubes. Por donde iba, queda alegre el aire y las aves mudas de su admiración. Dicen los pueblos zapotecas que el arcoiris nació del eco de su vuelo.
La vanidad le hinchó el pecho. Miraba con desdén y comentaba ofendiendo.
Se reunieron las aves. Juntas volaron hacia Dios.
-El murciélago se burla de nosotras -se quejaron-. Y además, sentimos frío por las plumas que nos faltan.
Al día siguiente, cuando el murciélago agitó las alas en pleno vuelo, quedó súbitamente desnudo. Una lluvia de plumas cayó sobre la tierra.
Él anda buscándolas todavía. Ciego y feo, enemigo de la luz, vive escondido en las cuevas. Sale a perseguir las plumas perdidas cuando ha caído la noche; y vuela muy veloz, sin detenerse nunca, porque le da vergüenza que lo vean.
Eduardo Galeano.Memorias del fuego.Los nacimientos.Editorial SIGLO XXI.